En mi proyecto muestro todo lo que mi familia ha tenido que huir por el mundo. Mi padre, mis abuelos y todos mis bisabuelos fueron refugiados. En la Hagadá se nos ordena recordar la experiencia de los refugiados: "En cada generación, un hombre debe verse a sí mismo como si hubiera salido de Egipto". La Hagadá nos ordena no solo recordar, sino también contar la historia, nuestro propio 'Éxodo'. Entonces, para mi proyecto, hice muñecos, uno para cada uno de mis bisabuelos, que cuentan su 'Éxodo': su exilio y cómo construyeron una nueva vida, incluso en tiempos difíciles. Además, puse botones sueltos dentro de la maleta, para mostrarnos que aunque sus vidas terminaron y sus historias están completas, todavía estamos construyendo nuestras historias. Tratamos de construirnos con heroísmo y fuerza como ellos, por eso elegí presentar así la historia de mi familia.